Lana Latxa

Variedad: Lana Latxa

Origen de la Fibra: Ovejas de la raza Latxa.

Procedencia: País Vasco y Navarra, España

Características:

• Fibra suave y entrefina.
• Longitud media y diámetro entre 26 y 32 micras.
• Amplia variedad de colores naturales.
• Alta calidad y resistencia.
• Utilizada para la producción de prendas de vestir y complementos.
• Producción tradicional y respetuosa con el medio ambiente.
• Ovejas alimentadas principalmente de hierba y forrajes locales.

La lana Latxa es un tipo de lana autóctona del País Vasco y Navarra en España, que proviene de la oveja latxa, una raza ovina originaria de la zona. La lana Latxa se caracteriza por tener una fibra suave y fina, con una longitud media y un diámetro entre 26 y 32 micras.

La lana Latxa es muy valorada por su alta calidad y resistencia, y se utiliza principalmente para la producción de prendas de vestir y complementos. Además, presenta una amplia variedad de colores naturales, que van desde el blanco hasta el negro, pasando por tonalidades marrones y grises.

La producción de lana Latxa se realiza de manera tradicional y respetuosa con el medio ambiente, ya que las ovejas pastan en terrenos naturales y se alimentan principalmente de hierba y forrajes locales. Esto hace que la lana Latxa sea una opción sostenible y responsable para los consumidores que buscan productos de alta calidad y respetuosos con el medio ambiente.

Historia de la lana Latxa

La lana lacha es la fibra natural que se obtiene de la raza ovina del mismo nombre. Las ovejas latxas son una especie presente en la cornisa cantábrica qué destaca por su pelo largo y áspero. 

Esta raza es una de las más primitivas de España, y ha sido utilizada para crear la especie mexicana chiapas. Está presente en áreas muy específicas (como el noroeste de Navarra y de Álava, y al este de Vizcaya y Guipúzcoa). También es posible encontrarla en Francia, donde se la conoce como manech.

¿Cuáles son sus orígenes?

El nombre que recibe este tipo de lana es bastante revelador de su carácter rústico. Como habrás adivinado, “lacha” proviene de “latxa”, una palabra euscalduna que significa “vasto”, en referencia a lo burdo de su tacto. Es gracias a esa aspereza y dureza que las ovejas pudieron resistir a las inclemencias propias de la climatología vasca.

Tanto el aprovechamiento cárnico como lácteo de estas ovejas es muy demandado debido a su gran calidad. 

Características de la lana

Características de la lana lacha

• Tacto áspero 
• Tipología lanar de origen churro, no presenta cruce alguno con la raza merina.
• Fibras lisas, gruesas y meduladas.
• Pelo liso y brillante. 
• Su clasificación comercial dentro de las lanas españolas la incluye en los tipos VII y VIII.
• Los vellones de estas ovejas destacan por no retener el agua y secar muy rápido. 
• Esta raza ovina destaca por la gran longitud de su pelaje, hasta el punto de que casi llega al suelo.
• Vellón de color blanco uniforme. Ello es así en las dos variedades de oveja latxa (de cara rubia y de cara negra).
• Vellón abierto, que cae a ambos lados de la columna vertebral.

Beneficios

1. Fibra ecológica: por un lado, su obtención redunda en el bienestar de las ovejas. Por otro, da lugar a un material totalmente renovable y biodegradable.
2. Versatilidad: tal y como veremos, la lana lacha es susceptible de satisfacer todo tipo de utilidades, tanto de la industria textil como de otros sectores (por ejemplo, agrícolas).
3. Resistencia: las prendas confeccionadas con esta fibra son extremadamente duraderas, por eso se las considera el vivo ejemplo del slow fashion.
4. Muy fácil de cuidar: su dureza simplifica considerablemente el mantenimiento.
5. Gran aislamiento térmico y transpirabilidad óptima.
6. Muy ligera y elástica, lo que le aporta gran confort.
7. Repele el fuego y el agua, por lo que es muy útil para fabricar prendas técnicas.

Usos

Dado que las ovejas latxas deben esquilarse todos los años, es necesario dar salida a su abundante producción lanar. Motivos ecológicos y económicos aconsejan transformar este residuo en un recurso aprovechable. Es aquí donde artesanos y emprendedores han salido al frente con sus ingeniosas propuestas.

• Aislante natural para rellenar prendas laborales de invierno (resiste muy bien las condiciones más extremas). Con ello se reemplazarían los rellenos sintéticos que habitualmente se emplean en la ropa técnica (como el poliéster de los plumíferos).
• Fines agrícolas (abono orgánico, macetas y acolchado biodegradables, fertilizante, etc.).
• Cintas de balizamiento y señalización.
• Alternativa al hilo empleado por las impresoras 3D
• Ovillos de lana lacha que pueden emplearse para elaborar prendas, accesorios o manualidades. 
• Ropa y complementos de alta costura, especialmente para la temporada otoño-invierno.
• Gran parte de esta producción lanera se exporta para fabricar alfombras y tapices.

A todo lo anterior hay que añadir la posibilidad de mezclar esta lana con otras fibras, a fin de multiplicar aún más sus posibilidades. En este sentido, algunos proyectos han logrado aumentar su suavidad para evitar que el roce de esta fibra sobre la piel cause picores.

Conclusión

Los planes destinados a revalorizar la producción lanar de las ovejas latxas sobresalen por su sostenibilidad medioambiental y por potenciar la economía autóctona. Además, todos ellos ponen de manifiesto lo polifacéticas que resultan estas fibras naturales.